Esta noche se va a celebrar en la sede del Consejo Local de Hermandades y Cofradías el Pleno Extraordinario de Elecciones para su Presidencia, siendo la primera convocatoria a las 20.45 horas y la segunda a las 21.15 horas.
Son dos los candidatos, con un amplio currículum cofrade en sus respectivas espaldas, los que se presentan como electores a este Pleno.
Uno es D. Manuel Muñoz Natera, que vuelve a presentarse tras acabar una Legislatura de cinco años ejerciendo como Presidente de la misma, y anteriormente ser Hermano Mayor de su Hermandad de la Cena durante quince años.
El otro es D. Pedro Pérez Rodríguez, abogado de profesión, ha sido durante cinco años Consejero de la UU.HH. en el área de Juventud y Hermano Mayor de su Hermandad de las Tres Caídas durante una Legislatura.
Si los hermanos mayores votan por mayoría absoluta a uno de los dos candidatos, será media hora después de la hora de comienzo del pleno cuando se sepa qué es lo que quieren los hermanos mayores para la Semana Mayor jerezana. En caso de que no haya mayoría absoluta, en una segunda votación decidirá la mayoría simple. Esas son las reglas de un pleno que presidirá el asistente eclesiástico, el sacerdote Juan Jacinto del Castillo, junto con el vicepresidente del Consejo, Rafael Vega, nombrado hace escasas fechas para cubrir la vacante de Ángel Heredia, que asumió la dirección de la hermandad de la Clemencia.
Los perfiles de los candidatos son muy dispares, así como sus programas. Manuel Muñoz Natera afronta las elecciones convencido de que su gestión al frente de la Unión de Hermandades ha sido satisfactoria los últimos cinco años. Una gestión enfocada principalmente a la caridad, y con una exposición mediática desconocida en un presidente hasta la fecha. Al actual presidente del Consejo le ha tocado además defender a las cofradías en un tiempo en el que la incomprensión de la sociedad a las mismas se ha intensificado, y los apoyos económicos y de otra índole del gobierno municipal han disminuido.
El aspirante Pedro Pérez simboliza la revolución al aspirar a la presidencia del Consejo. Un soplo de aire fresco, una manera diferente de entender la gestión de la Unión de Hermandades. Propone que el Consejo sea un elemento vertebrador de la Semana Santa, que coordine, aglutine y una a las cofradías de la ciudad, y que no tenga un presupuesto determinado para ciertas partidas, ya que repartirá los beneficios de los palcos y sillas de manera equitativa entre las cofradías. Una apuesta además decidida por la juventud, frente a la veteranía de Natera. Dos conceptos distintos, aunque ambos apuesten por el cambio de la Carrera Oficial.
Destacar la presencia en la lista de Consejeros del reelector de nuestro hermano Manuel Salado Argudo, nuestro anterior Hermano Mayor y miembro de Junta de Gobierno durante más de dos décadas, que afronta esta posibilidad de ser Consejero con una tremenda ilusión.
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